viernes, 31 de julio de 2009

Lo siento chicos, se casó mi hermana.




Parece mentira que todavía no haya dicho nada de la boda de mi hermana, hace unos meses. Quizás porque me pilló con la lengua fuera:

-¡Mudo! ¡Se casa mi hermana!
-¿Qué dices? Por dios, no puede ser. Eramos muchos: ¿Quien ha sido?
-Un chico que no conozco, pero de los nuestros. Espera que llamo a Peri.

(telfono)

-Peri, se casa mi hermana.
-Maldita sea: dile que me de la oportunidad que me debe.

Si. Lo siento chicos, se casó mi hermana, sois mis amigos, pero teneis que entender que ya no seremos cuñados.

***
La boda fue mágica y bella, Mudo brilló con su flauta y fue precioso que una ráfaga de viento soplara justo en el momento en que se casaran, cortándonos a todos la respiración.



Por su felicidad y la de Rafa, todo mi amor para ellos.

jueves, 30 de julio de 2009

La Camisa de BB King.

Hace pocos minutos me ha llamado mi padre para contarme la siguiente historia:

Resulta que mi padre es un hombre de tintorerías. Recuerdo abrir el armario de su pequeño apartamento y encontrarmelo plástificado cómo si se hubiesen dejado la investigación de un crimen a medias: "No toque nada, estámos resolviendo el caso" Dicen dos agentes con un donut, volviéndose a meter en el armario. Si, la casa de mi padre siempre ha sido para mi motivo de fantasías: cómo aquellas fotografías que cubren toda una pared, todas pertenecientes a un fotógrafo desconocido que se encontró en la calle; o la colección de instrumentos de cuerda, o las máscaras africanas, una de ellas pertenecientes a un príncipe exiliado que le intentó timar para adentrarse en el mercado negro de máscaras mágicas clandestinas... pero eso es otra historia. Ahora que os habeis hecho una idea de la casa, vereis más clamaramente que tipo de persona es mi papá.
Cómo decía, es un hombre de tintorerías, y esos hombres siempre se pasan a recoger camisas antes de un viaje. Así que me llama desde el areopuerto y me dice: "Miguel, tengo poco tiempo, pero te tengo que contar una historia que es de guión.."

...Salgo de casa a recoger una camisa y cuando llego a la tintoría, me encuentro con una camisa que no es la mía. "Oiga, esta no es mi camisa" - Mi padre es un hombre directo- La encargada coge y tras hacer unas breves comprobaciones le dice: "Lo siento señor le Goff (con esa cortesía que tienen los franceses para mandarte al carajo) pero su camisa la tiene B.B King. Ha habido un error.
-¿BB King? Dice mi padre engolado, mirando su reloj - porque sobra decir que a los areopuertos franceses o se llega tres horas antes o se queda uno en casa, discreto. - ¿Cómo que BB King?
-B.B King, el bluesman famoso.

En este momento de la historia suelto una carcajada de las que sólo puedo tener con mi papá. Ahora resulta que su camisa la tiene el guitarrista negro de la chapa en el pie, ¿y mi padre la suya?
-BB King, da un concierto esta noche en Paris y necesitaba su camisa para tocar, por un error le hemos dado la suya.

****

-Lo que no entiendo Miguel - dice mi padre - es cómo carajos puede ponerse mi camisa ese mastodonte, la reconvertirá en bufanda.
-¿Pero y no le preguntaste que cómo se había producido el error? Digo imaginándome a BB King en medio de un concierto multitudinario, con una chaqueta de New Orleans y por debajo, ajustadísima, la camisa de mi padre.
-No. Iba com prisas. Me dijeron que me compensarían y una serie de cosas y yo me fui de allí sin camisa.
-Pero, ¿Dónde quedó la verdadera camisa de BB King?
-Eso si que es un misterio.


*****

Esa noche, un hombre llega cansado despues de un fantástico concierto. BB KIng, el famoso guitarrista de blues, hace sonar la chapa de debajo de su zapato sobre los peldaños de la escalera de un piso parisino. Llega a su cuarto, enciende la televisión, un famoso político da un discurso sobre la libertad, mientras besa a su novia modelo, y ante el espejo, nota que su camisa azul de la suerte, sigue siendo de la suerte, pero ya la suerte no le sienta cómo antes. Las ventanas se abren de par en par por un golpe de viento y en un parpadeo se da cuenta de que esa no es ni mucho menos su camisa. Su mente hace esfuerzos por salir de los riffs de blues que le persiguen desde la infancia y por un momento parece entender que la bolsa de la tintorería no tenía la forma que el recordaba. Sin embargo, repara en la televisión, dónde un famoso político da un discurso con la que es - lo reconoce claramente - la camisa de la suerte de BB King. En ese momento el Señor Le Goff, coge un avión hacia el mar, libre de camisas, y en un piso de malasaña unos dedos repiquean de azul, y pienso en mi padre y en lo mágicas que son las tintorerías.

domingo, 26 de julio de 2009

Gustos

Me gustan las personas que se dan cuenta de que tienes frio y ni has temblado.

Me gustan los azucarizillos cuadrados. No me gustan la gente que dice que ya es Martes, si son las tres de la mañana, un Lunes.

Me gusta verter agua, no me gustan los andares complicados de los tacones.

viernes, 10 de julio de 2009

Permanecer

Llaman por teléfono y dicen: ¡Has dejado la casa hecha un desastre!

¿Hecha un desastre? Intento visualizar el lugar del que me he ido, mientras granizo la voz de Loli. La voz de Loli es espeluznantemente amable, Loli es de las que piensan que van a heredar la empresa. Loli, cuanto te echen pondrán a otra, y sólo habrá cambiado el nombre. Loli es buena gente, eso se dice ella, todas las noches.

-Nosotros no podemos hacernos cargo del gasto de limpiar tu piso.
-¿Limpiar? Digo lamiendo la oreja del teléfono. Lo que he hecho es poner un parqué, Loli.
-No es nuestra responsabilidad.
-No digas "nuestra" , ni "nosotros" Loli. Que eres la secretaria de una empresa de arrendamiento de fincas.
-Pero...El suelo está hecho un desastre.
-Es un parqué Loli, no una trampa para osos.
-¡Has dejado incluso letras en la nevera!

Y Loli tenía razón, había dejado mi casa hecha un desastre: un desastre emocional. No me había atrevido a quitar el parqué y menos aún a desescribir la nevera. Era un testamento con palabras sensuales.
¿Conoceis aquellas palabras de poesía imantada para las neveras? Me veo quitando una a uno los mensajes de amor olvidados. Oigo una risa desde el cuarto de baño y hago esfuerzos por no llorar.

Cuando bajo a la calle la estantaría , la lámpara y el parqué que restaban, veo a una pareja de la mano esperando el autobus. Por azar, se han quedado justo en medio de mis cosas, y es cómo tener invitados en casa. U otra pareja amándose en ese lugar.

Guardé todas las palabras imantadas en una taza, que se volcó y ha llenado el fondo de mi mochila de palabras.

Devenir.

Durante algún tiempo quise ser alguien. Ahora me doy cuenta de que tendría que haber sido más concreto.